
El índice Ibex 35 cerró junio en 14.000 puntos, tras una sesión positiva con alza de 0,3%.
La mejoría del selectivo se atribuye al optimismo en sectores clave y la expectativa por datos macro favorables.
A pesar de un entorno global incierto, los inversores confían en la resiliencia de la economía española.
Analistas destacan que el cierre del trimestre con niveles elevados refuerza las perspectivas para el segundo semestre.